viernes, 30 de septiembre de 2011

LA ESFINGE Y LAS CLAVES DEL GRAN CICLO COSMICO

La Constelación de Leo frente a la esfinge hace 13.000 años

La constelación de Acuario frente a la Esfinge, hoy 13.000 años después


Los Sacerdotes que sobrevivieron la desaparición de la civilización Atlante y el diluvio universal -los que sembraron la semilla de nuestra civilización- sabían que este tiempo que vivimos sería un momento decisivo y de gran trascendencia para la humanidad. Ellos sabían que un nuevo período de 26.000 años comenzaba para la humanidad. Por eso inmediatamente después del diluvio, tallaron la Esfinge en Egipto para llamar la atención sobre el Gran Ciclo Cósmico que causó la destrucción de su civilización y que causaría grandes cambios a la nuestra.






Hace 13.000 años, el Sol, activado por un pulso del Centro de la Galaxia, irradió una cantidad inusual de energía hacia la Tierra, provocando el Diluvio Universal. Un evento registrado en los libros sagrados de prácticamente todas las culturas antiguas. Ese latir del corazón de la Galaxia es regular -sucede cada 13.000 años- y es precisamente una de las variables que determinan el Gran Ciclo Cósmico.


La Esfinge en su tamaño, su forma, su precisa localización y su orientación guarda las claves del Gran Ciclo Cósmico de 26.000 años, el que anida todos los ciclos menores que ordenan nuestra vida. La Esfinge y su complemento el Zodíaco -un mapa de las estrellas que habían construido a lo largo de miles de años, era uno de los conocimientos más extraordinarios que su civilización había reunido sobre el orden del universo- describen el Gran Ciclo Cósmico, el orden superior que determina cuando suceden los grandes cambios sobre la tierra. Su rostro de piedra observa como se desplazan por el horizonte, las 12 constelaciones zodiacales. Tardan 26.000 años en pasar, una a una al Este frente a ella. Los sacerdotes atlantes sabían que ese giro de 360º de la bóveda celeste, se ajusta a los intervalos que regulan la emisión de energía, desde el centro de la galaxia.


Tallaron su enorme cuerpo de león sobre el eje este-oeste a los 30º exactos de latitud y 30º de longitud para convertirlo en un instrumento simbólico de medición astronómica. Sabían que su gran tamaño la convertiría en un motivo de curiosidad y en un enigma a escala planetaria que motivaría a muchos hombres a descifrar la información que ellos deseaban transmitirnos. Su tamaño megalítico le permitiría sobrevivir el paso de los siglos, conservando las claves del intervalo en que se manifiesta el latir del corazón de la Galaxia y el Gran Ciclo Cósmico.


Su precisa localización y la orientación de su cuerpo la relacionan con el equinoccio de primavera, el día en el que el Rey Sol se mueve por el cielo de manera muy precisa entre esos dos puntos cardinales, este-oeste. Ese día siempre lo han utilizado los astrónomos de todas las culturas para registrar y relacionar los movimientos de los astros en el cielo porque ese día el plano por el que se mueve el sol -donde está la eclíptica- y el plano sobre el que la Tierra gira a su alrededor -que tienen una inclinación de 23,5º entre ellos- se intersectan el uno al otro. Esta intersección sucede dos veces cada año: el 21 de marzo, día del equinoccio Vernal y el 21 de septiembre día del equinoccio otoñal.


Los astrónomos usan el día del equinoccio vernal como una marca posicional espacio-temporal, un punto de referencia desde el cual registrar y medir los movimientos del Sol, de los planetas que lo orbitan y de las constelaciones de estrellas en la bóveda celeste. A partir de ese día el sol se mueve hacia el Este 1° por día, proyectándose sobre las 12 constelaciones del Zodíaco, las que definen el gran ciclo cósmico. Esa es la manera en que notamos la traslación de la Tierra alrededor del Sol desde la superficie de nuestro planeta. Además ese día excepcional del equinoccio vernal los rayos solares caen perpendiculares al Ecuador (latitud 0°) iluminando ambos hemisferios por igual, lo que hace que los intervalos de luz y de oscuridad sean exactamente iguales. Los antiguos lo veían como un día de neutralidad, porque la luz y la oscuridad, el bien y el mal están en equilibrio.


Además grandes descubrimientos astronómicos se han realizado en uno de los días en que un eclipse lunar coincide con un día de equinoccio. Un día así le permitió a Hiparco de Nicea descubrir la precesión de los equinoccios, el desplazamiento de 1º cada 72 años del Sol con relación a las constelaciones zodiacales, que luego confirmó al registrar sus posiciones relativas año tras año el día del equinoccio vernal. El registró como se desplazaba la posición del Sol año tras año con relación a la Estrella Espiga. Así estableció que una estrella zodiacal vuelve a situarse en la misma posición en el horizonte terrestre transcurridos 25.920 años (se desplaza 1º cada 72 años, le toma 72x360º=25.920 años dar un giro completo que le permita regresar al mismo punto). Los científicos actuales llama la ¨Precesión de los Equinoccios¨ a este giro de de 26.000 años, que los antiguos llamaban el Gran Ciclo Cósmico. Un eclipse Lunar sucede en uno de esos extraordinarios días en que la brillante Luna llena se enrojece y luego se oscurece súbitamente -hasta casi desaparecer del cielo- por la sombra que produce la Tierra al interponerse entre ella y el Sol que la alumbraba. Como vemos el día del equinoccio vernal es una de las claves más importantes de la Esfinge por la estrecha relación que tiene con el gran Ciclo Cósmico.


Los sacerdotes sobrevivientes al cataclismo que destruyó la Atlántida decidieron tallar su cuerpo con la forma de un León agazapado presto a saltar en dirección al punto en que sale el sol el día del equinoccio para marcar el momento exacto hace 13.000 años cuando frente a ella comenzaron a aparecer las estrellas de la constelación de Leo. Una marca espacio-temporal importantísima porque definió el punto en que terminó el anterior Gran Ciclo Cósmico -con el diluvio universal causado por el aumento de la irradiación del Sol- y el comienzo del actual Ciclo Cósmico. El período glacial del Pleistoceno termina al aumentar súbitamente la irradiación del Sol, lo que derrite el hielo que cubría los continentes, el agua del enorme deshielo eleva 120 metros el nivel del mar. El punto definido en la constelación de Leo relaciona el Gran Ciclo Cósmico con cambios en los niveles de actividad del sol.


Al cuerpo de León le tallaron la cabeza de un hombre para relacionar el punto en que el sistema solar entra en la constelación de Leo con el punto en que llega a la constelación de Acuario, en su movimiento por el espacio. El rostro mira hacia el este para tomar consciencia de la aparición por el horizonte de la constelación de acuario en el solsticio de verano del año 2012. La Esfinge relaciona dos constelaciones separadas por 13.000 años o medio ciclo cósmico. El Eje entre dos de esas constelaciones, Leo y Acuario, divide el Zodiaco y la bóveda celeste y marca los momentos en que el centro de la Galaxia irradia la Superonda que incrementa la actividad del Sol. Leo marca el punto inicial de cada Gran Ciclo y 26.000 años después, marca también su punto final, mientras Acuario marca su punto medio, 13.000 años despues. El momento en que la humanidad termina el ciclo más primitivo, instintivo y difícil en cada ciclo de su evolución. Cuando liberamos nuestra mente de la animalidad original, y terminamos nuestra fase de desarrollo instintivo. La Esfinge simboliza este momento, cuando se asoma saliendo de la tierra frente al horizonte a observar el cosmos para entender que tiene un orden perfecto. Representa el momento en que nos elevamos sobre los hombros de la nuestra animalidad, cuando realmente somos libres porque tenemos la información de sabiduría, que nos permite decidir conscientemente hacia qué dirección dirigimos nuestro perfeccionamiento.


La forma de la Esfinge tiene las claves para definir el intervalo de 13.000 años en el que el Sol avanza 180º por la ecliptica para llegar al punto medio del Gran Ciclo Cósmico exactamente en el año 2012. La combinación de la Esfinge y el Zodíaco -que grafica los movimientos de las constelaciones de estrellas frente al horizonte terrestre- nos entrega información fácilmente verificable sobre el Gran Ciclo Cósmico y llama nuestra atención sobre el Sol como el catalizador de grandes cambios a escala planetaria.

lunes, 19 de septiembre de 2011

“El Tiempo del No-Tiempo” sucede para que desechemos nuestras falsas creencias

Es nuestro pensamiento el que atrae hacia nosotros una realidad de sufrimiento o de armonía y son nuestras creencias las que determinan nuestra manera de pensar. Muchas de ellas son falsas porque que nos llenan de sentimientos negativos, nos hacen pensar que somos víctimas inocentes. Al sentirnos víctimas, perdemos nuestra confianza y nuestro poder y se los entregamos a nuestro victimario. Nos resignamos a una vida desdichada cuando, para transformar nuestra realidad, sólo necesitamos identificar y suprimir esas creencias falsas que nos impiden alcanzar la felicidad. Necesitamos dejar de creernos víctimas de los demás, del orden social existente o de Dios. Tampoco existe la mala suerte, porque todos tenemos el poder para atraer la abundancia y la dicha a nuestra vida. Es el momento preciso para desechar los sentimientos negativos que nos mantienen sumidos en la depresión y en la desesperanza. Para limpiarnos de vergüenzas, culpas, tristezas, odios y miedos que nos impiden vivir un presente pleno de bienestar.


Las falsas creencias sobre la felicidad son la fuente más importante de desequilibrio, conflicto y sufrimiento en nuestra sociedad


Nos hemos convencido de que la felicidad se encuentra afuera, que nuestra paz interior depende de lo que sucede en el mundo exterior. Que para ser felices necesitamos tener poder y control sobre los demás, acumular dinero y coleccionar posesiones materiales. Llegamos a creer que nuestra felicidad está en controlar a los demás, en decidir cómo deben vivir nuestros seres queridos y en imponerles nuestro punto de vista cuando no están de acuerdo. Somos felices mientras ellos vivan como nosotros queremos, mientras todo se ajuste a nuestro punto de vista sobre la realidad. También creemos que la felicidad está en tener acceso a experiencias que nos producen placer o satisfacción de los sentidos, en la posesión de objetos, información o dinero. Nuestra sociedad se volvió materialista, nuestra vida se convirtió en un negocio, le pusimos precio a todo y acabamos convencidos que todo se puede comprar. Convertimos la acumulación de dinero en una meta, evaluamos a los hombres por su riqueza. Transformamos el dinero en el único medio para ser felices, para subir o bajar en la escala de los placeres, las satisfacciones, las comodidades y las clases sociales. No importan los medios que se tengan que utilizar para conseguirlo. Estas falsas creencias despertaron ademas una codicia generalizada…


sábado, 10 de septiembre de 2011

AUMENTAN LAS MANCHAS Y LA ACTIVIDAD DEL SOL

El nivel de la irradiación del Sol no es constante. Aumenta y disminuye periódicamente en ciclos de once años debido a la aparición de manchas solares.

Sobre la brillante superficie del Sol aparecen y desaparecen manchas oscuras irregulares. Son oscuras porque tienen menor temperatura que el área que las rodea. Alrededor de estas manchas también se aprecian vórtices similares a los de los huracanes, que a veces producen explosiones violentas. Llamaradas de plasma de hidrogeno y de helio hirviente, que emiten una enorme cantidad de energía, rayos gamma, rayos X y rayos ultravioleta. Éstos llegan en solo 8 minutos a la magnetosfera, que es elcampo magnético protector de laTierra, agitándolo y produciendo lo que se conoce como tormentas magnéticas de alcance mundial que pueden causar daños a las instalaciones eléctricas e interrupción de las radiocomunicaciones.

Se han registrado 23 ciclos de actividad de 11 años, desde cuando éstos comenzaron a medirse en 1610. Hoy estamos en el ciclo 24, que alcanzará su punto máximo de manchas solares en el año 2012. Los Ciclos Solares 22 a 23, entre 1991 y 2008, han sido de los que más manchas solares y más intensas tormentas magnéticas han tenido en 253 años de registros, el actual ciclo 23.
http://juferpy.blogspot.com/2010/08/mancha-solar-mas-grande-que-la-tierra.html

La cantidad de manchas y de explosiones solares se ha triplicado. De 30 manchas en promedio por año que había entre 1600 y 1900, se pasó a 60 entre 1900 y 1944. Promedio que ahora está en 90 manchas por año. Entre el 28 de octubre y el 4 de noviembre de 2003 sucedió la explosión solar más grande jamás registrada, la gigante mancha solar 486, que produjo un bloqueo de 11 minutos en todas las radiocomunicaciones del planeta. Esta mayor actividad del Sol es una de las principales causas de ¨El Tiempo del No Tiempo¨, el período de rápido e intenso cambio que profetizaron los Mayas para 1992-2012.

Este video muestra que el Sol está realmente ardiendo y como la llamarada solar satura los detectores de rayos X a bordo de los satélites GOES que registran la actividad del Sol.


En Febrero 24 de 2011 otra llamarada solar. Una nueva prueba de la mayor actividad del Sol.


En junio 7 de 2011 tuvo lugar otra gigantesca llamarada solar que afortunadamente no irradió en dirección a la tierra.


http://physicsworld.com/cws/article/news/18692
http://sohowww.nascom.nasa.gov/hotshots/2003_11_04/

viernes, 9 de septiembre de 2011

EL ELENIN: COMETA PROFETIZADO POR LOS MAYAS?:FALSA CREENCIA.


Me han llegado varios correos en los que se anuncia el fin del mundo ¨profetizado por los Mayas¨ debido a un presunto impacto contra la Tierra del cometa Elenin. Tengo que desilusionar a los que desean que el mundo se acabe porque este no cometa no es Tun’Kaj o Piedra del cielo, el que profetizaron los mayas que aparecería antes del 21 de diciembre del 2012, anunciando la llegada de los 13 cielos, la nueva era dorada.


El Elenin es un cometa compuesto esencialmente de hielo que tiene unos 3,5 kilómetros de diámetro. En su punto más cercano a la Tierra -el próximo 16 de octubre- llegará a 90 veces la distancia entre nuestro planeta y la Luna. Quiere decir que lo más cerca que llegará es a 35 millones de kilómetros de distancia, dificil entonces que se estrelle contra el planeta. http://www.jpl.nasa.gov/m/news/index.cfm?release=2011-255


En 1983 el cometa Iras-Araki-Alcock, pasó a solo 6 millones de kilometros de la Tierra. De habernos impactado, la explosión hubiera sido mayor que si se reventaran simultáneamente todas las bombas atomicas existentes. Sin embargo no tuvo tanta prensa como ahora el Elenin. El cometa Hyakutake fue descubierto solo con tres meses de anticipación por el SpaceGuard program, que explora la presencia de objetos cercanos a la Tierra y establece su órbita para saber si representan algún peligro para el hombre. El Hyakutake pasó a solo 14 millones de kms de la tierra. Su cercanía permitió descubrir en su interior hidrocarbonos, metanos, acetilenos y etanos que son la base de la vida.


Los Mayas veían los cometas como agentes de cambio que vienen alterar el equilibrio existente para que ciertas estructuras se transformen, permitiendo la evolución de la conciencia colectiva. Eso sucedió con el cometa Eko Kan o Estrella Serpiente en 1519 que anunció el retorno de Quetzalcoatl, a pesar que quien apareció fue Hernán Cortes con su estela de muerte, peste y destrucción. El cometa anunciado por los mayas también fue profetizado por muchas religiones y culturas, inclusive aparece en la Biblia, en el libro de las revelaciones donde es llamado Ajenjo, porque supuestamente amargará las aguas de toda la Tierra.


Se argumenta que el Elenin puede llegar incluso mover el eje del planeta, pero realmente no tendrá ninguna influencia sobre la Tierra, como no sea a través de las Falsas Creeencias que se están propagando. Se dice también que ocasionará tres días de oscuridad, me pregunto como podría un pequeño cometa de solo 3 kilómetros de diámetro oscurecer al astro Rey que tiene 1.392.000 kilometros de diámetro.


Lo más triste es que ni siquiera nos dará un bonito espectáculo como el que nos dió el Halley en 1986. Si lo llegamos a ver será con telescopios o binoculares poderosos en una noche muy, muy oscura. http://www.universetoday.com/wp-content/uploads/2011/08/Elenin-stereo.jpg


Y para concluir parece que se está desintegrando. Astrónomos que monitorean sus movimientos anunciaron que desde el 19 de agosto ha perdido brillo, cuando ocurrió una poderosa tormenta solar, que golpeo al cometa precisamente cuando el Elenin se encontraba en su Perihelio, su punto más cercano al Sol. Su cola esta disminuyendo rápidamente de tamaño. Lo más probable es que el cometa no sobreviva y se desintegre en los próximos días. De manera que es conveniente dejar de propagar Falsas Creencias que solo llenan de miedo a los incautos...

http://www.universetoday.com/88494/comet-elenin-could-be-disintigrating/

viernes, 2 de septiembre de 2011

Hun’ab-K’uh, El corazón de la Vía Láctea y el número 26

Vivimos en una galaxia espiral a la cual llamamos la Vía Láctea. Los mayas la veían como un sistema de astros ordenados jerárquicamente que se mueven en giros concatenados, mientras orbitan alrededor de su centro, donde creían se encontraba el palpitante corazón de Hun’ab-K’uh. Así llamaban al vasto organismo, a la manifestación de vida infinita, que contiene todo lo que existe. El grandioso ser vivo que nosotros llamamos Universo.


La ciencia actual afirma que en el centro de la galaxia se encuentra el 5% de la masa de todas las estrellas que ésta contiene. Se trata de una esfera un millón de veces más grande que nuestro Sol y tres millones de veces más densa, por lo que tiene una enorme fuerza gravitacional que aglutina a su alrededor y mantiene en movimiento a millones de estrellas.


Actualmente se la llama Sagitario A* y se encuentra a 26.000 años luz de distancia de nuestro Sol, que da un giro a su alrededor en 260’000.000 de años, a una velocidad aproximada de 260 km por segundo. Lo cual significa que cualquier acontecimiento que observemos en ese lugar, realmente ocurrió hace 26.000 años. Desde que nuestro Sol nació, hace 4,57 billones de años, ha orbitado el centro de la galaxia 26 veces. 26=2x13 es un número que fue utilizado por los mayas en el Tzol-Kin -260 Kin Oob en 20 semanas mayas de 13 días, en 7 niveles- como fractal del orden que estructura los ciclos del universo. 26.000 años dura el Gran Ciclo Cósmico que medían con el Tzol-Kin para determinar la llegada del año 2012, el punto centro de ese intervalo, 13.000 años después del diluvio universal.


La ciencia aún no tiene información suficiente para saber con precisión qué sucede en el centro de la galaxia. Tan solo se ha confirmado que Sagitario A* emana un flujo constante ondas de radio de muy baja frecuencia vibratoria y que pulsa periódicamente ondas de alta energía.